Hay alguién que vive dentro de mi, me quiere desde siempre, me acompaña y espera por mí todos los días. Él quiere ser mi amigo. ¿Sabes quién es? ¡¡Es Jesús!! ¡Yo no lo veo, pero quiero aprender a conocerlo! ¡Quiero ser su amigo! Pero, sobre todo quiero que me enseñe el camino cuál es el camino para ir al cielo.