Gabriel Barrientos, reportero de un diario de San Antonio, quiere escapar de las noticias policiales que día a día pasan por el cedazo de su mente y su pluma. Los sórdidos “hechos de sangre”, con que ha tenido que convivir casi sin descanso durante varios años, están trastocando su conciencia hasta el delirio de confundir la realidad con lo ocurrido en sus sueños. Llega a creer que posee el don de vaticinar ciertos sucesos, sin embargo, lo que nunca logrará predecir es que la crónica roja de aquel puerto lo perseguiría hasta más allá de lo comprensible, incluso al volver a su natal y “mutante” Villa Alemana. Un relato tan delirante, disperso y paranoico, como realista, irónico y territorial.