Un abogado con su vida resuelta, en un pueblo tranquilo, acepta tomar un sencillo caso ¿Qué podría salir mal? Nada, a menos que –claro está– el cliente fuera un ser de otro planeta. Para ser su primera incursión, estamos frente a un autor con un mundo literario enriquecido por su lenguaje y por su forma de ver el mundo. En la era de la sobreinformación y la post verdad, las fuentes noticiosas carecen de rostro y la veracidad de lo inmediato predomina. La novela, con inteligencia y humor, aborda este tema y funciona por eso, porque su argumento remece y nos hace cuestionar los tiempos en los que vivimos. ¿Hacia dónde vamos? Ojalá que cerca de San Roque.