Hace mucho frío, acaban de empezar las vacaciones de Navidad. Jaime, Álex, Caro y Nico están emocionados porque son los invitados de honor de la Emperatriz Argenta en los juegos de invierno de Pernabuc, pero un mácabro suceso de al traste con la grán final..., y está claro que no ha sido un accidente. Pequeños bichos negros lo invaden todo y Argenta no puede salir de su palacio porque tiene que atender a las víctimas si no quiere ser una de ellas. Los niños son la única opción.