Andrés del Olmo, en estos cuentos zigzagueantes, reflexiona -quizás sin proponérselo- sobre la vida moderna y las sociedades contemporáneas. En sus contradicciones y relaciones con un pasado que está siempre latente entre los ciudadanos que las conforman. Humanos comunes y anónimos, enfrascados en el difícil desafío que nos impone el querer crecer y pensar que, en el futuro, todo puede ser mejor.