En esta nueva obra, Stephen Randall, reconocido académico canadiense, analiza las relaciones diplomáticas entre Colombia y Estados Unidos a partir de 1974, año de quiebre para ambos países. Por un lado, es el año en el que termina el Frente Nacional en Colombia y, por el otro, es el momento en que Estados Unidos inicia una recomposición de su política exterior luego de la guerra de Vietnam. En palabras del autor: "Esta reflexión sobre las relaciones entre Colombia y Estados Unidos se inicia a treinta años bien corridos del inicio de la Guerra Fría y se extiende hasta un poco más de dos décadas después de la caída del Muro de Berlín. Hasta cierto punto, se puede decir que asuntos relativos a la Guerra Fría marcaron la relación bilateral entre los dos países, pero solo lo hicieron en la misma medida que la llegada de dineros provenientes del narcotráfico infundió nueva vida a los movimientos guerrilleros en las décadas de 1970 y 1980". La originalidad de este libro reside en su enfoque: un estudio bilateral que destaca la dimensión colombiana del problema y la dinámica interna que incidió sobre la política exterior del país.