Sólo cuando el hogar y la escuela general tiempos y espacios para la expresión plástica y el goce creador, las nenas, los nenes y las personas adultas pueden liberarse de la estereotipada "casita", con techo a dos agus y humeante chimenea. Surgen así las manchas, las formas, las composiciones, con materiales más o menos con vencionals, con soportes de diferentes calidades, con una diversidad de intenciones y