Abriendo la puerta al libro de Job El Antiguo Testamento está principalmente dividido en la Tora, el Neviim y el Ketuvim. La Tora representa los cinco Libros de Moisés que describen acerca de la ley y otras enseñanzas. El Neviim son los profetas, y el Ketuvim es la sabiduría de los ancianos de Israel. El libro de Job pertenece al Ketuvim. Habla acerca del sufrimiento del hombre, la providencia de Dios y de la fe de Job. El nombre “Job” significa: “un hombre que se arrepiente” o “un hombre que llora”, pero el significado exacto no es certero. Job vivió en un área llamada Uz, ubicada en algún lugar cercano a la frontera entre Iraq y Arabia Saudita. Algunos eruditos creen que Job es un personaje ficticio que surgió de una obra literaria. Pero Job en realidad existió. La Biblia nos habla acerca de su lugar de nacimiento, el número de sus hijos y el detalle de su gran riqueza. Ezequiel, Noel y Daniel fueron hombres que existieron históricamente, y la Biblia nos dice que Job también fue en realidad un hombre que existió históricamente (Ezequiel 14:14; 20). En el Nuevo Testamento, Santiago también nos habla acerca de la paciencia de Job (Santiago 5:11). El libro de Job contiene un gran vocabulario hebreo que no encontramos en otros libros del Antiguo Testamento. Además cubre muchos temas a profundidad con un amplio conocimiento incluyendo astrología, geografía, zoología, oceanografía, minería, turismo y leyes. Es verdaderamente una obra maestra de la literatura.