Enrique no imagina el cambio radical que su vida va a dar en una noche del verano de 1964 en Santa María de los Ríos, un pueblo burgalés. Esa noche marcará su destino, emigrará a E.E.U.U, perderá a sus hijos, se verá inmerso en el intrigante y fascinante mundo de Hollywood y conocerá un amor imposible por el que luchará con toda su alma. Azar, erotismo y exotismo se combinan en esta sensual novela para dar cuerpo a una apasionada historia de amor, en la cual no hay cabida para los prejuicios. Horizontes de luz mantiene la intriga hasta el final asistiendo el lector de la mano de su protagonista, Enrique, a una serie de asombrosos acontecimientos vitales, en esa búsqueda incansable de la felicidad, en los que las piezas encajan como en un puzle a medida que avanza la trama.