Entre convulsiones y espasmos, con las antiguas mitologías y los valores sacros detrás, en las marquesinas del bulevar, en el vértigo de las rutas rápidas, los poemas transcurren y reflejan toda la maravillosa sostenida en el vórtice de un régimen que cae y otro que se levanta. Construyen ese nuevo mito que sería la poesía moderna.