"El fútbol era su pasión. Aunque bien pensado, lo que a Miguel le apasionaba de verdad era correr y jugar al aire libre. Eran ocho hermanos en casa y era difícil rebullirse a gusto entre aquellas cuatro paredes. La calle, por eso mismo, llamaba a gritos a Miguel. Y quien dice la calle, dice sobre todo el gran parque municipal que se extendía frente a su casa." Ramón García, autor de este relato, conoció personalmente al protagonista y cuenta lo que él le contó. Bien de viva voz o en retazos autobiográficos de algunos de sus libros.