Vivir, viajar y escribir son tres caras de una experiencia única y no existen fronteras entre éstas, porque vivir es, a fin de cuentas, desplazarse en clave literaria, dice la autora cuando comienza su recorrido en el Monasterio Armenio Mekhitarista de San Lázaro, Venecia. Desde ahí traza su ruta en busca del libro en tanto objeto como una representación concreta de la suerte de pueblos que sobreviven a invasiones, diásporas y genocidios. Para María Inés Taulis, la realidad es como el agua.