LOS EDUCADORES CON OFICIO SABEN QUE SU TAREA ESTRIBA, NO SÓLO EN PROMOVER COMPETENCIAS O DESTREZAS, SINO EN ALENTAR HÁBITOS INTELECTUALES Y MORALES QUE AYUDEN A LAS PERSONAS A CRECER COMO SERES HUMANOS.Introducción 13Primera parteEl crecimiento humanoCapítulo 1. Cómo formar la segunda naturaleza 251. La cuestión preliminar 252. Qué es la persona. 303. Cómo crece la persona. 344. La formación de hábitos, clave del crecimientode la persona 385. Hábito y autodisponibilidad. 46Capítulo 2. Dimensiones del crecimiento humano 531. El crecimiento intelectual. 542. El crecimiento moral. 703. Dimensión cívica o social del desarrollo de lapersona. 754. La dimensión afectiva del desarrollo humano 815. La dimensión religiosa y la cuestión por elsentido 86Segunda parteEducar hoyCapítulo 3. Educar en un contexto deseducativo 951. El panorama del nihilismo europeo. 952. Amistad y diálogo significativo 1013. Recuperar el sentido de la tarea docente. 105Capítulo 4. Sobre la llamada educación posmoderna. 1091. Originalidad sin originariedad 1112. Un novedismo decadente 1143. El fondo filosófico de la pedagogía posmoderna. 1174. Los tópicos de la pedagogía posmoderna 1225. Respeto hacia la realidad. 129Tercera parteEducar con la palabraCapítulo 5. Educación y verdad. 1371. Un reto para la Teoría de la Educación 1372. Nihilismo heroico y nihilismo banal. 1403. Educar es profesar 1424. El humanismo socrático. 1455. El diálogo franco, no sofístico, es el medioeducativo por excelencia. 1516. Almas de paja o personas de criterio. 154Capítulo 6. Educación y conversación 1591. El valor sociopolítico de la palabra 1592. Verdad y verosimilitud 1623. La búsqueda socrática 1644. Opinión y verdad 1675. El decir no agota lo dicho. 1696. Se aprende a pensar tomando partido 1747. Rehabilitar una cultura del diálogo 177Referencias bibliográficas 181Fuentes 185