La Odisea nos adentra en un mundo real, el Mediterráneo antiguo, pero repleto de peligros y poblado por seres fabulosos: magas, ninfas, gigantes, monstruos... Los avatares marinos del héroe en esta segunda gran epopeya griega alejan a Odiseo (Ulises desde los romanos) de los escenarios de la épica, para situarlo en un ámbito fantástico, más próximo al mundo maravilloso de los cuentos de misterio.