A lo largo de sus páginas, el libro traza las rutas que la planta y sus derivados recorren a través de procesos productivos a pequeña escala, que s e nutren del intercambio constante entre el universo rural y el urbano. La alusión a las raíces, en el título de la publicación, sugiere una mirada que reconoce tanto el valor de la semilla y su siembra como el de sus cultivadores: campesinos que han resguardado el conocimiento de la cosecha, de su mantenimiento, y de la paciente transformación que la planta debe atravesar hasta convertirse en el almidón con que se preparan arepas, panes, achiras y coladas, entre otros deliciosos amasijos.