A partir nuestra necesidad de explicarnos el mundo y fenómenos que en él se suscitan es que creamos historias que van pasando de boca en boca, en las que narramos prodigios y sucesos que rebasan la naturaleza y, de esta manera, nuestro entendimiento. Así surgen anuales, charros, lloronas, sirenas encantadoras, hombres-jaguar, gigantes, hadas y un sinfín de personajes que rescatan o nutren el imaginario popular que todas las culturas poseen. Este es un recorrido po los pueblos y sus moradores, por sus costumbres y sus historias, por sus temores y sus milagros, animado con nuevos colores, sonidos, olores y visiones.