Dieciséis años después de su ruptura, Andrea y Marcelo se vuelven a encontrar. La inmadurez de ella, y la tozudez de él, provocaron el distanciamiento siendo veinteañeros. Casi dos décadas más tarde, ya divorciados y con hijos, constatan que la separación fue sólo un paréntesis en el tiempo, pues el amor vuelve con más intensidad y sensatez que antes. Sin saberlo, han estado entrelazados álmicamente, durante más de cuarenta reencarnaciones. Sin embargo, en la cúspide de la relación, un hechizo
"Excelente libro!!! "