El auto de Pablo está dañado y la grúa lo debe recoger. En el taller lo reparan y al final hasta lo lavan en el lavadero de autos. Cuando Pablo ve su auto reparado, limpio y hermoso, quiere volverse adulto de inmediato para poderlo manejar él mismo. ¡Con un timón de verdad para todos los pequeños fanáticos de los autos!