Este libro explica cómo la creciente globalización ofrece oportunidades para un aumento del bienestar en todos los países. Los problemas del crecimiento económico y del empleo no debemos atribuirlos al proceso de globalización, ya que tienen, casi siempre, un origen endógeno y específico en cada país. Por eso han de ser resueltos en el ámbito interno de las políticas económicas de los gobiernos. Para ello son necesarias -siguiendo a los autores de este libro- unas políticas económicas diferentes y amplias reformas en la política del mercado de trabajo y en la política social.