La divulgación científica pretende hacer accesible el conocimiento generado por la ciencia. Su función no es traducirlo, como si se tratara de otro idioma, sino transformarlo para tender un puente entre la ciencia y el ciudadano común; busca la universalización del conocimiento generado por los científicos para explicar de forma sencilla, al público no especializado, fenómenos asombrosos o procesos impresionantes que ocurren a nuestro alrededor.