Existe cierto número de pequeñas virtudes que no causan ruidosa admiración; mas cuando están ausentes, las relaciones familiares se hacen tirantes y difíciles. Estas pequeñas virtudes son precisamente las que hacen soportable y agradable nuestra vida cotidiana. La vida familiar exige un gran número de pequeños deberes que a menudo suelen descuidarse, ya porque son numerosos, ya porque np parecen muy importan