Imagina que estás en posesión de un poder misterioso capaz de informarte en cada momento de lo que es mejor para ti. Que te indica qué estudios o qué profesión debes escoger, si todo va bien a tu alrededor, si te puedes fiar de la persona que acabas de conocer o si te conviene esa nueva relación. E imagina que ese «supersentido» te puede convertir en una persona segura y carismática, consciente de tus valores y alineada con tus principios. No tienes que imaginar, porque ese poder misterioso está ya dentro de ti.