El presupuesto concebido como la cuantificación monetaria del plan de gestión implica establecer previamente la misión, visión, objetivos estratégicos, estrategias, metas y políticas, los cuales, se materializan, por medio de planes, programas y subprogramas con la proyección de los recursos financieros que se requieren para llevar a cabo lo que la administración de cada organización se ha presupuestado. Por lo tanto, el manejo empresarial de corto plazo necesita la proyección de los efectos económicos que puede producir el cambio en las estrategias o las políticas; de esta forma el presupuesto guía la acción de los responsables de las áreas funcionales de cada organización, facilita la toma de decisiones y permite detectar, de forma oportuna, desviaciones respecto a los resultados esperados. El presupuesto fija, para cada partida de gastos, el monto máximo permitido y, respecto a los ingresos, el valor mínimo esperado.