Este libro surge tras una noche de insomnio que Reiner Riedler pasó en la unidad de cuidados para bebés prematuros de un hospital mientras velaba a su hijo recién nacido. Rodeado de máquinas que sirven para salvar vidas el fotógrafo empezó a reflexionar sobre cuánto debemos a esos aparatos a priori tan alejados de los seres vivos. Poco después comenzó este trabajo Imágenes que reflexionan sobre el cuerpo humano la enfermedad y la prolongación de la vida en un viaje que empieza en la física y termina en la metafísica.