Aprender ha sido una constante en la vida del ser humano, donde primeramente nos permite poder sobrevivir en la medida que vamos aprendiendo a hacer las cuestiones más básicas de la vida, poco a poco y con el apoyo de los demás no solo aprendemos a vivir, sino también a compartir nuestras ideas, nuestras metas, nuestros sueños brindándonos la posibilidad de crecer, de compartir, de saber; pero siempre es necesario reconocer que ante todo se necesita de un orden en nuestras actividades para aprender a sistematizar los procesos que nos acerquen a alcanzar lo que nos proponemos.