el guión cinematográfico es un objeto vacilante que aspira a una transformación radical: convertirse en película. su laconismo y su división en numerosas escenas piden una lectura atenta, perspicaz, imaginativa; y un lector, por tanto, competente, capaz de identificar sus partes, sus elementos y modos (tiempo, punto de vista y narradores) y las relaciones que hacen de ellos el entramado para construir la historia.