Jean Starobinski interroga a tres figuras ejemplares de la locura. Remontándose a documentos capitales, pone en evidencia lo que nos fascina y nos aterroriza en la alienación. Lo que está en juego no es estético: se trata de nuestro principal poder, el que ejercemos sobre nuestros actos, el que disuelve el furor. Se leen tres textos bien de cerca: el Áyax de Sófocles, el relato del evangelio de marcos que narra el exorcismo del endemoniado de grasa por Cristo y, por último, una obra pictórica, la pesadilla de J. H. Fussli, donde la aparición del íncubo provoca un efecto de inquietante extrañeza. ¿Cuál es la potencia que provoca el extravío? ¿Un dios irritado? ¿Un emisario de satán? ¿Un desorden en los humores del cuerpo -los que los antiguos llamaban melancolía? Pero también hay que preguntarse: ¿Cuál es la potencia que puede salvar? Poniendo en práctica su saber de historiador, de médico, de crítico, Jean Starobinski se entrega de lleno a la escucha de los textos y de sus relaciones internas.