Obra publicada en 1929, una habitación propia trata, básicamente, de la relación entre la condición femenina y la literatura, desde el punto de vista de una de las mejores y más singulares escritoras del siglo XX, Virginia Woolf (1882-1941), que volcó en cada una de sus páginas su inconfundible sensibilidad, el acervo de sus vivencias y su particular subjetividad. -una mujer necesita dinero y una habitación propia para dedicarse a la literatura-, proclama la autora al principio de estas páginas. Y toda aquella persona sea hombre o mujer interesada por los siempre sutiles vínculos entre vida y creación artística no se arrepentirá de adentrarse en ellas. Traducción de Catalina Martínez Muñoz
"Muy bueno!"