Reseña del libro "Veronika Decide Morir"
Veronika Decide Morir El nuevo libro de Paulo Coelho, una novela sobre la pasión y la locura Durante su juventud, Paulo Coelho fue internado en tres ocasiones en una institución para enfermos mentales, La Casa de Salud Dr. Eiras, de Rio de Janeiro. Era un adolescente de comportamiento peculiar, tímido y revoltoso a la vez, que quería ser artista. El hecho de que destacara parecía ser razón suficiente para internarlo. Cuando abandonó el sanatorio por última vez en 1967, Paulo Coelho se prometió a sí mismo que algún día escribiría acerca de este tema. Ese día ha llegado. Veronika decide morir, su nueva novela recientemente publicada en Brasil, trata de la locura. A lo largo de la conmovedora historia de Veronica, el autor habla de aquellas personas que no encajan en los cánones de lo que la sociedad establece como normal y que se han visto obligados a hallar un camino distinto. Veronika es una joven nacida en Eslovenia. Es bonita, tiene un buen trabajo y muchos admiradores. Su vida transcurre sin demasiados avatares, ni mucha felicidad ni mucha tristeza. Pero ella no es feliz. Por lo que una mañana de 1997 decide morir. Veronika busca la muerte, pero lo que encuentra es vida. Fantasías y sueños. Pasión y locura. Deseo y muerte. A partir de una conocida experiencia personal, Paulo Coelho nos invita con este libro a ver más allá de la rutina. Todavía hay tiempo de celebrar el milagro de un día más de vida. El último libro de Paulo Coelho, Veronika decide morir, habla de la locura y de la necesidad de hallar una alternativa que experimentan quienes a menudo son víctimas de los prejuicios de otros, tan solo porque piensan de manera diferente. Durante cinco meses consecutivos, Veronika decide morir ha sido número uno en las listas de venta de Veja y Epoca (revistas), O Globo, Jornal do Brasil, O Estado de Sao Paulo y Folha de Sao Paulo (periódicos), por mencionar tan sólo algunos de los rotativos más importantes de Brasil. En los dos países de habla hispánica (Argentina y Chile) fue directo para la lista de ventas. En Argentina, fue #1 durante varias semanas consecutivas, en El Clarín ENTREVISTA A PAULO COELHO Cuál es la idea central de su libro? El hecho de que hayamos sido educados para aceptar lo que la sociedad nos imponga. Nunca nos preguntamos por qué hacemos lo que hacemos o por qué lo dejamos de hacer. Quienes aceptan semejante imposición y hacen lo que les recomienda la mayoría son considerados como gente normal. Por otro lado, a quienes intentan escapar de una vida remanufacturada e intentan cumplir sus sueos generalmente se les considera unos locos. En Veronika decide morir relato la historia de quienes, por alguna u otra razón, no siguen el sendero de lo que es normal y se sienten obligados a encontrar un nuevo camino. Por qué ha decidido hablar de la locura y del suicidio? Hay muchos tipos de locura: la destructiva, que lleva a quienes la sufren a luchar contra sí mismos, puesto que se sienten inútiles, indignos y discapacitados. La pasiva, por otra parte, transforma a los seres humanos en máquinas de dormir, comer y trabajar, víctimas de la rutina. Por último, existe lo que la sociedad designa como locura y que yo, personalmente, considero como una virtud: el quebrantar las normas de buena conducta y hacer que se cumplan nuestros sueños. Es peligroso? Naturalmente. Pero quien vive está condenado a morir, así que debemos comprender que no podemos controlarlo todo. John Lennon definía la vida con una frase muy sencilla: la vida continúa mientras que tu estás ocupado haciendo planes. Puede la locura ser sagrada? La locura positiva es sagrada. San Pablo dijo: "Sé un tonto para convertirte en sabio". Por qué no trata Veronika decide morir de los temas espirituales que han caracterizado tu obra precedente? Yo creo que si lo hace, aunque quizás de una forma menos convencional. El libro expone que el ser humano debe abrirse a fin de llegar a comprender que estamos rodeados de miseria, que debemos aceptar esta realidad y que debemos continuar viviendo de la manera más digna posible. Hace años que su trabajo alcanzó reconocimiento internacional, pero durante este año ha consumado su proyección en el extranjero. Cómo valora semejante éxito? Aunque de forma muy abstracta, leo recortes de la prensa internacional, recibo invitaciones a diversos acontecimientos, pero por mi condición de escritor no he conseguido tener la misma relación directa con mi público que la de un cantante con el suyo. Para mí esto es muy positivo, pues me permite conservar el mismo nivel de intimidad en mi trabajo que el que tenía durante el inicio de mi carrera. Cuando escribo un libro lo hago para mí mismo, en un intento de contestar algunas de las preguntas que me he formulado a lo largo de mi vida. Soy consciente que cuanto más cerca me siento de mi alma, más próximo estaré de lo que Jung llamaba "el alma mundial". Pero también soy consciente de mi éxito e intento obtener un beneficio del aspecto más fascinante de mi existencia: el contacto humano. Ello me facilita la entrada en un país extranjero, puesto que siempre encuentro a personas afines a mi modo de pensar. Nunca me siento extranjero, y esto es muy positivo. Además, ello me da esperanzas. Hay mucha gente en el mundo que intenta superar sus propias limitaciones y construir algo más significativo.
Nacido en Río de Janeiro en 1947, trabajó como director y autor de teatro, periodista y compositor antes de dedicarse a los libros. Desde la publicación de su primer libro, El Peregrino de Compostela (Diario de un mago), se han vendido más de 320 millones de ejemplares de sus novelas en todo el mundo. Entre sus mayores éxitos destaca El Alquimista, considerado el libro brasileño más vendido de todos los tiempos. Se ha publicado en 170 países y traducido a 83 idiomas.
Coelho ha recibido destacados honores internacionales, como el premio Crystal Award que concede el Foro Económico Mundial, la prestigiosa distinción Chevalier de l’Ordre National de la Légion d’Honneur del gobierno francés y la Medalla de Oro de Galicia. Desde 2002 es miembro de la Academia Brasileña de las Letras, y desde 2007 ejerce como Mensajero de la Paz de las Naciones Unidas.
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