Reseña del libro "Celinda en el paraíso de los locos"
Si tú, lector, esperas como yo lo inesperado, para hacerlo en cierto modo inolvidable con la visión en dimensiones líricas: piensa en el color inasible de un atardecer, que hilvana caligrafías con la sonrisa gioconda del Sol. Y en una esperanzada construcción del sueño en el bosque de la noche, que lleva de la mano afinidades simbólicas y estéticas por la alta nube que prefigura la Amada en el tiempo y espacio del arcano; de aquel aire aromado por los celestes caminos de los verticales celestes, y diademados sentires que quieren el silencio y la prisa del trascendente vuelo; con una no consentida invocación a la postrimería en el sedal que en la humedad del agua anuncie albura y en pura desnudez su vestidura; y en el lienzo bordado con los afanes del día el poema que eleva el amor hacia la cima bella donde la llama, difusamente, parpadea, y se sublima la rima con la estrella.Yo, aunque lleno de frío, intentaría con la fuerza que me prestara su Ángel y su Gracia, hacer arder el alma en el crisol de un tiempo otro, trascendido. En aquel otro espacio, y en otra geometría. Integrado en el centro de tu altura. Vertical celeste de la esfera que tu sombra blanca configura, Celinda, tu ternura.