Hace ya mas de sesenta anos que Christopher Robin agarro a su amigo, el Oso Eduardo -- a quien millones de admiradores conocen como Winny de Puh -- y lo arrastro por una pata regordete, escaleras abajo. Puh ha perdurado, todavia ligeramente rollizo, un Oso de Poco Cerebro, pero de gran corazon: la inmortal creacion de A.A, Milne y Ernest H. Shepard. Las aventuras de Puh y Porquete, Buho, y el siempre melancolico Iiyoo son tesoros inmortales de la ninez. Estas historias contienen la frescura que caracteriza a los cuentos clasicos de antano.